El río Ebro, represado en el embalse de Sobrón, ha tajado a lo largo de los siglos entre las sierras de Pancorvo y Arcena un desfiladero por el que la carretera BU-530 se abre paso mediante túneles horadados en la roca. Rebasada la presa, en las inmediaciones del pueblo de Sobrón, se hallan un área recreativa, las fuentes de un antiguo balneario y varios restaurantes, todo ello junto a la espesa vegetación ribereña del Ebro.